El inicio del año 2024 trajo consigo un aumento en el precio de la nafta, y se anticipa que habrá más incrementos en febrero.
Apartir de este jueves, el Gobierno podría aumentar un impuesto que incide en el precio del litro de nafta y gasoil y, por lo tanto, podría haber una nueva suba en el valor de venta en el surtidor. Se trata de los impuestos al combustible líquido (ICL) y al dióxido de carbono (IDC), que la administración anterior dejó sin actualizar durante 10 trimestres consecutivos, desde julio de 2021.
Estos impuestos deberían actualizarse cada tres meses según la variación del índice de precios al consumidor (inflación) acumulada del trimestre anterior, como se estableció en el decreto N° 501, de mayo de 2018.
En tanto, entre las empresas que refinan los combustibles dijeron que si se actualiza el impuesto según la inflación de los últimos 10 trimestres, la nafta debería aumentar $95 y el gasoil, $65. Esto equivaldría a una suba promedio de 11%.
La súper ya alcanza los 806 pesos en las estaciones de servicio, y Raúl Castellano, presidente de la Cámara de Empresarios de Combustibles, advierte que podría haber un aumento del 25% debido a la posible actualización en los impuestos a los combustibles.
Castellano explicó que la actualización de los impuestos fijos a los combustibles líquidos es prácticamente un hecho, ya que, por ley, deberían actualizarse cada tres meses según la inflación, pero en la práctica no se han actualizado en más de dos años. «Lo que no sabemos es si se va a recuperar de una sola vez todo el atraso en estos impuestos o si se va a hacer en dos o tres pasos sucesivos», aclaró.
En caso de una recuperación total, la incidencia sobre los precios de venta sería del 20% al 25%, lo que llevaría el precio de la nafta súper a alrededor de 1.005 pesos a partir de febrero. Esta noticia llega en medio de una crítica situación por los constantes y fuertes aumentos, lo que ha provocado una caída en las ventas del orden del 20%, según Castellano.