Debido a la pandemia, cientos de bares y restaurantes porteños vieron sumamente interrumpida su actividad.
Si bien siempre pudieron operar mediante delivery, las sillas del lugar siempre estuvieron acomodadas, inmóviles, sin recibir a nadie.
Así fue como esa posición inerte de las sillas fueron utilizadas como campaña en redes sociales para exigir el regreso a la actividad.

De esta forma, varias heladerías, restaurantes, bares y locales de comida, pusieron de foto de perfil el diseño de una silla al revés con el hashtag «#SillasAlRevés«.
Además de la imagen de perfil, la consigna era publicar una foto en blanco y negro de las sillas colocadas sobre las mesas.